23 may 2011

HOTEL ANACONDA


Pasé cinco intensos días en el Amazonas y ni por un momento mis glándulas sudoríparas dejaron de trabajar. Por las mañanas, después de la ducha, utilizaba la misma cantidad de desodorante que de antimosquitos, y mi pituitaria sigue aún lesionada por soportar aquella mezcla de aromas.
Para conocer la selva amazónica elegí un punto en el mapa donde convergen tres países. El aeródromo donde aterrizamos pertenece a Brasil, la población donde me alojé forma parte de Colombia y el lugar de mis comidas olía a sazón peruana. Leticia se llama el pueblo donde me hospedé, igual que nuestra prinzesa pero sin la z, sin corona y con un futuro algo más sombrío. Para cobijarme, elegí el hotel Anaconda, porque su nombre me remitía  a los cuentos que, sobre la selva, escribió Horacio Quiroga.
Nunca he conocido un lugar tan inhóspito y con tan poco olor a literatura.


Hice todo aquello  que se espera de un turista: me desplacé río arriba y abajo, observé los dientes de una piraña, vi delfines ciegos, caimanes, guacamayos y monos de una fealdad indescriptible; durante veinticuatro horas conviví con familias indígenas que sobrevivían cultivando yuca y pescando pirarucú. Huelga decir que carecían de todo aquello que nosotros, los occidentales, consideramos imprescindible.
Una picadura (que en el trópico duele como una mordedura) hizo que tuviera que desplazarme al único hospital de la zona y, a la salida, una mujer me explicó que hacía varios días que los médicos tenían retenido a su marido y que no lo soltarían porque ella no poseía dinero para pagar las curas que le habían realizado. Y así lo corroboraron algunos familiares de enfermos que se encontraban en la misma situación. Por lo visto, es una práctica habitual secuestrar a los pacientes (no darles el alta) hasta que alguien pague la deuda que el enfermo contrae con el servicio médico; los que lograban zafarse sin pagar eran expuestos, para escarnio público, en listas chincheteadas en la puerta del hospital o del consultorio médico.
Todos los días mueren miles de personas que, de vivir en nuestro mundo, podrían salvarse con una simple visita a su médico de cabecera. Qué os voy a contar que no sepáis.
El sarpullido de mi brazo se curó con la dosis pertinente de corticoides que me inyectaron. Pero creo que el aguijón seguirá siempre ahí.

Me ilusiona ver lo que está ocurriendo en la Puerta del Sol. Yo también creo que ya era hora de salir a la calle y reivindicar mejoras en el sistema democrático, más justicia, más participación ciudadana, más...    Me ilusiona pensar que lo que se pide en Sol es algo que trasciende crisis coyunturales, y que queremos un cambio estructural porque el sistema actual no funciona. Me ilusiona pensar que estamos reclamando algo más que todo aquello que perdimos con la crisis, el trabajo entre otras cosas, pero sobre todo, me ilusiona pensar que para conseguir objetivos de hondo calado ya somos maduros y conscientes (¿o no lo somos?) de que tendremos que prescindir de aquellas enormes regletas eléctricas donde enchufábamos infinidad de aparatejos que lo único que hacen es sobrecargar la red.

21 comentarios:

mariajesusparadela dijo...

Creo que nuestros corazones laten un poquito más de prisa.

flower dijo...

Yo estoy emocionada con lo de Sol y cada una de la ciudades donde miles de jóvenes están poniéndose de pie para reivindicar lo justo.

(Cada día le digo a mi hijo (tiene 16 años) que vaya un ratito a apoyarles, a estar con ellos, a escuchar todo lo que piden, lo que denuncian, para que se vaya enterando y se meta en esa maravillosa rueda que no es otra que defender lo nuestro, la justicia y la igualdad.

¡Viva la juventud! Esta entrada tuya me ha encantado, cacho feo. Besos,

Anónimo dijo...

Un poco triste, su relato. Es una sensación muy parecida a la que me traspasa a mí cuando veo algún documental o cosa parecida sobre esas zonas (a las que no he ido nunca ni, honradamente, tengo intención de ir): la admiración por esa gente y la lástima -sí, lástima, esa palabra abominable- y el cabreo sordo por la tremenda desigualdad e injusticia que padecen. Porque, nos guste o no, la cosa seguirá siendo así por mucho tiempo.
En cuanto a lo de aquí, yo también estoy moderadamente ilusionado. Y enchufo la menor cantidad de aparatos que puedo, se lo juro; pero no de ahora, sino de siempre.

Raúl dijo...

Buf, el Amazonas... Algún día iré, si puedo. De pequeño lo asociaba con historias y aventuras, y ahora lo asocio con historias y aventuras XD En cualquier caso, mi primer viaje al otro lado del charco será a Haití, cuando sea y cuando llegue.

Gracias por tu relato. He buscado 'Leticia (Colombia)' en el Google Earth y es verdad que cuesta ubicarlo en algún país, incluso vía satélite.

flower dijo...

Me olvidé decirte, cuando te comenté, que la acuarela es una pasada.

De paso te recuerdo que, aunque mi memoria es un desatre, pero es selectiva, hay una promesa de una acuarelita, en papel, de las de verdad, y bla, bla, bla... El resto de bla-blas ya sabes lo que dicen, ejem...!

;)

Mua,

Ātman dijo...

Cuando yo era pequeñito mi padre, que era misteriosamente cruel y tierno a la vez, nos leía a mi hermano y a mí cuentos de Horacio Quiroga, que nos embelesaban, pero que nos indignaban por sus injustos desenlaces (una vez que el autor se había asegurado de tener al lector conmovido y sensibilizado, siempre ocurría lo peor). Ya de mayor conocí la selva Mexicana, no tan exuberante como la amazónica, pero selva al fin, y descubrí que no tenía nada de jardín del edén sino más bien de infierno dantesco, igual que la economía neoliberal capitalista, allí todo se autorregula en una lucha despiadada por la supervivencia. Será bueno reconocer que la naturaleza salvaje de por sí es una fuente de equilibrios y economía sostenible, pero que: ¡Qué maravillosos son los sueños humanos!

Tu acuarela me hace acordar a El beso de Klimt.

Un saludo.

diminuto blog dijo...

"Hice todo aquello que se espera de un turista..."

¡JA JA JA JA...!

Trueno, luego vivo. Porque mi risa ha sido atronadora. Gracias.

Hace tiempo que en casa prescindimos de aparatos eléctricos de gran consumo. Bueno, siempre fue así.
Ello no nos hace mejores, sino menos facturados.
Pienso que la desconexión es más difícil cuando el conectado habita en una gran ciudad, y porque su alimento se basa en la oferta cultural de cines, teatros, bibliotecas..., todos ellos necesarios, pero que nunca pueden sustituir al verdadero placer que se experimenta caminando entre un campo de amapolas.

Ya, ya sé que no es fácil; pero tampoco imposible.

Eres muy bueno, Caruano.

;-)

Caruano dijo...

MARÍAJESÚS, esperemos que siga latiendo, sin riesgo de isquemia. Bico.


JARDI-FLOWER,
si los medios de comunicación (importantísimos) no dejen de dar cobertura al fenómeno del 15 M, éste seguirá latiendo. Pero es imprescindible que los convocantes empiecen a organizarse, a concretar sus reivindicaciones y a aportar soluciones.
Un beso, maja.


RICK, le aseguro que lo que cuento no es lo más triste que viví y que escuché en esa parte de la selva amazónica, refugio de contrabandistas y narcotraficantes de machete inmisericorde.
Yo también siento ese cabreo sordo del que hablas.
Sobre lo de aquí, pues yo estaba más ilusionado hace una semana; creo que es un gesto (o un grito) importante y espero que no quede sólo es eso.

Caruano dijo...

SONÁMBULO,
a pesar de todas las incomodidades que supone pasear por aquellas tierras, es una de las mejores experiencias que he tenido. Es difícil olvidar el olor a tierra húmeda (todo es húmedo) cuando aterrizas en tierras amazónicas.
Me parece muy bien que vayas a Haití ,y que nos lo expliques a la vuelta para que no nos olvidemos de que sigue siendo el país más pobre del mundo, y casi el más necesitado; aunque dicen que en Puerto Príncipe encuentras tiendas de artículos de lujo y supermercados que no se distinguen de los de aquí (no hay desabastecimiento como lo hay en otros países pobres) curiosamente, más del 80 por ciento de la población no puede acceder a los productos básicos.


JARDI,
todo llegará ;-)

Caruano dijo...

ATMAN,
tu hermano y tú erais la excusa para que tu padre leyera y disfrutara de los cuentos de Quiroga (tus palabras entre paréntesis encierran una poética del escritor).
La selva, como bien dices, solamente es un paraíso para los animales, y los pobres humanos que en ella habitan sobreviven, a duras penas, bajo los designios de la economía de la que hablas. Doblemente jodidos están.
Muchas gracias por tu comentario, Atman (en mi teclado no encuentro el sombrero para tu A).
Saludos.



DIMINUTO BLOG,

"Trueno, luego vivo", ¿de dónde sacas tantos aforismos?.
Yo creo que podríamos prescindir, por ejemplo, de la mitad de las bombillas que utilizamos a diario (sobre todo de alumbrado público: España es uno de los países con más contaminación lumínica). Y como nos descuidemos, "cuando acabe la crisis" nos alicatarán los campos de amapolas.
Saludos, Paco Amor.

diminuto blog dijo...

Me vinieron en el magín con unos cuantos apotegmas y algunas falacias, que de todo me vino. También me vienen de la ignorancia.

Quienes gestionan lo público son gestes de pocas luces, así que tardarán en apagar bombillas. Hasta entonces, debemos confiar en nuestros gestos.
Parecemos urracas. Tanto gustamos de lo que brilla.

Mcartney dijo...

Caro Caru:
Desde mi leve ausencia, leve pero persistente, sólo decirte Re-welcome.
Visca el Barça.
☺ ☺ ☺

Miguel Baquero dijo...

Pues seguramente si nos hubiéramos descuidado y hubiéramos permanecido en casa, la Sanidad hubiera llegado a eso. Ahora al menos se lo pensarán dos veces antes de intentar algo parecido... o eso quiero pensar

Anónimo dijo...

Hola,

me uno a la tentiva de exorcizar tanto alien acomodado en la hamaca que teje y teje nuestro ejército de neuronas coma y me paso a esta otra red para compartir con vos la alegría que destilan las plazas de mayo punto aquí os dejo a un pez Castells dirigiéndose a los pececillos de P. Catalunya coma esos hijos de los ríos y la mar que dan brincos y saltan y escriben poesía porque quieren saber qué hay paréntesis si algo hay paréntesis del otro lado de la pecera punto

http://www.vilaweb.cat/noticia/3891748/20110527/manuel-castells-porucs-mon-uniu-vos-xarxa.html

vera manda balbuceos de oreja a oreja

te quiero mucho, caruano

E. C. Pedro dijo...

Es un gusto tenerte de vuelta. ¿O al revés...? Nunca he ido a Leticia, que vendría a quedar en Colombia de una manera borgiana: Mediante un acto de fe. Respecto al Sol, pues todos vemos con simpatía y expectativa el desarrollo de los hechos. Ahora, vemos también con aprehensión efectos colaterales inquietantes, como la victoria 'por descarte' del PP. ¿Me estaré metiendo en lo que no me importa diciendo que si estas protestas son flor de un día pueden en potencia ser nocivas?

Un abrazo.

Caruano dijo...

DIMINUTO B.

quienes gestionan lo público suelen ser unos iluminados.
Qué razón tienes, joío.


MACARNI,

¿leve ausencia?, eso se lo dirás a todos. Por fin publicas algo, collons.
Y al Barça no hay que desearle que visca porque ya visca muy bien: física y monetariamente ellos, los jugadores, y muchos dirigentes y ex-dirigentes naciocatoindependentistas (que estiman molt a Cataluña) con teléfono rojo Barcelona-Zúrich-Andorra, o Las Caimán.
A pesar de todo, que visqui el Barça.

Un abrazo, Fernando.

Caruano dijo...

MIGUEL,
Yo también quiero pensar lo mismo que tú. De momento, el alabado modelo de gestión sanitaria catalana (que consiste en hacer trabajar al personal sanitario el doble que en otras comunidades -porquesinotevas- se quiere implantar en otros sitios. "Mutuatis mutuandis", es el lema de nuestra derecha: mutualistas no somos pero en mutualistas nos convertiremos (traducción, más que libre, libertina).

Saludos!


QUERIDO ANÓNIMO (MÁS QUE QUERIDO):

ESTUPENDA Y POÉTICA MANERA DE UNIRSE STOP OJALÁ AL OTRO LADO DE LA PECERA LAS AGUAS NO ESTÉN TAN CONTAMINADAS STOP TIERNO BESITO A TU CHURUMBELA Y A TU CHURUMBA STOP I LOVE YOU TOO, ANÓNIMÍSIMO MÍO.

P.S. Con lo que a mí me gusta que me escriban mis anónimos, nunca me escribís, joputas.

Caruano dijo...

PEDRO, amigo allende los mares,

ya estás tardando en ir a Leticia (creo que tienes vuelo diario desde Bogotá); la selva no es tan amable como uno piensa, pero no te deja indiferente, al contrario, creo que te vuelve difernte. Además, después de la experiencia amazónica apreciarás más el estupendo clima de tu ciudad. Ojalá puedas ir. (Me encantó lo de la "manera borgiana")

Y, no, no te estás metiendo en lo que no te llaman cuando opinas sobre los inquietantes efectos colaterales (ni cuando opinas sobre cualquier cosa, ya sea de tu país o de cualquier otro, que para eso eres libre de decir lo que quieras, y el que se ofenda: ajo y agua).
Opino igual que tú sobre los efectos colaterales; las protestas surgidas en la Puerta del Sol fueron sólo un grito de disconformidad hacia TODO (o eso creo), sin concretar. La ciudadanía ha preferido votar PP que, curiosamente, sostiene y auspicia esa ideología neoliberal que nos ha llevado a este desastre. Democracia impera (y así debe seguir).
Yo espero que estos gritos disconformes se aplaquen y pasen a la acción: poniendo ideas sobre la mesa y propuestas plausibles para poder llevarlas a cabo. Todavía es pronto para saber en qué se concretará todo esto, yo estoy moderadamente ilusionado (aunque no esté de acuerdo con muchas de las pancartas e ideologías que cohabitan en las plazas), y cuando pierda la ilusión, también lo haré saber y criticaré todo lo que yo crea criticable del quinceemeismo.
Me encantaría saber que el movimiento 15M sirve de aliciente para que otros países tomen nota y sigan su estela (sin los errores que nosotros podamos cometer en el proceso).

Un abrazo, Pedro.

Paco Becerro dijo...

Lo de sol es ilusionante. Más aún en mi caso cuando es mi hijo uno de los que por allí se organizan, y pausadamente, expresan su indignación y demandan propuestas más o menos razonables, y bien argumentadas.

Lo del aguijón espeluzna. Cuando yo estuve y vi la unión de las aguas del amazonas y el río negro y todo lo que describes, por suerte no me picó nada que volase.

Lo del secuestro de pacientes es tremendo.

un abrazo Caru

Miss Celanea dijo...

Queridísimo (aunque lejos) Caruano:
1º Como te lo montas, vaya viajes que te pegas.
2º Qué experiencia más triste y lo peor es que para que nosotros podamos vivir como vivimos (coche, casa, moto, tele, gps, ordenador...)tiene que haber gente en el mundo que viva así. Tendremos que intentar equipararlo, ¿o no?
3º Hay cosas en este país, que consiguieron nuestros padres (los tuyos y los míos, aunque sean de diferentes generaciones), lo cual no quiere decir, que esté todo conseguido.
4º Me alegra que te emocione Sol, te invito pues a participar (aunque sea on line, pues esta lucha es de todos)Soy crítica con la situación actual de la plaza, pero sé, porque leo todos los días, que hay mucha gente trabajando detrás en propuestas concretas que nos ayuden a ser mejores ciudadanos a quitar del medio a los políticos corruptos, y a tener una democracia real y participativa.
Sin más, te dejo un texto que le escribí A mis mayores (entre los que considero que te puedes encontrar a medio camino, pues tu eres muy, muy joven :-)

A mis mayores:

Ahora que han pasado las elecciones y que la derecha está más fuerte que nunca me gustaría alentaos a que os informéis bien (si no lo habéis hecho ya) y que os impliquéis en este movimiento. Vosotros que habéis peleado por una democracia y se ha convertido en una "bancocracia". No nos olvidemos que la casta política vive porque nosotros los "elegimos" y les pagamos su sueldazo con nuestros impuestos. Nosotros somos sus jefes y no al revés. Si nos mantenemos unidos podremos conseguir que se nos escuche y dejen de ningunearnos. Lo que ha pasado estos días es histórico. Somos una generación preparada, gracias al esfuerzo y ahínco de nuestros padres y de nosotros mismos, pero sin trabajo o con trabajos muy precarios, mientras unos pocos viven con grandes sueldos, coches oficiales, trajes regalados, sueldos vitalicios y otras lindezas... Esto no es lo que vosotros queríais para nosotros, esto no es lo que yo quiero para mis futuros hijos. No consideremos que lo que pasó ayer en las elecciones es una derrota. NO NOS REPRESENTAN. ABAJO LA LEY D´HONT. DEMOCRACIA REAL YA.

Por nuestros hijos, por vuestros nietos. Esta lucha es de todos.

Besos,
Ángela

Anónimo dijo...

Nuestros corazones se han sincronizado leyendo tus palabras. Estoy contigo en los sentimientos de la lucha ciudadana. De esto podemos aprender todos, para reivindicar individualmente, como seres dignos y reclarmar nuestro derecho a ser respetados como persona y no como un mero número y contribuyente al ente general al que pertenecemos sin saber muy bien cómo funciona y en qúe grado nos manipulan.
Lo que sí tengo claro, es que hay fines de semana que cambian tu vida, y que rodearte de personas que te transmiten su experiencia de vida de forma honesta y generosa, no tiene precio. Gracias por vuestra hospitalidad. Han sido unos días increíbles.
Fran López Murcia (de Jalicia)